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| El mar en calma en Palermo |
Dicen que preguntando se llega a Roma, yo concretamente no iba a la capital de este lindo país, iba al hotel donde tenía mi hospedaje. Cogí el bus (Shuttle Bus) nombre muy británico para estar en el país de la bota. Dicen que en Sicilia reina o reinaba la mafia, la sigue reinando pero de otra manera. Pues qué queréis que os diga amigos/amigas sicilianos/as mafiosos hay por todas partes, y por desgracia hacen daño de una manera u otra. Por casualidad, en la transitada y de buen ambiente Via Vittorio Emanuele había una exposición de No Mafia.
Una exposición en la que he salido con el corazón encogido, si tengo un adjetivo
para describir esta magnífica exposición y bien trabajada es de: impactante. Yo pensaba que no existía esto de la Mafia pero documentos reales e impactantes me han mostrado que si, que existía, y que aún existe, y que en España desgraciadamente hay mafia, os puedo decir un ejemplo: miembros políticos rescatando entidades bancarias y la gente del pueblo que iba a ser desahuciada suicidándose. Mientras los políticos, gastándose el dinero público en "caprichos"... Digamos esa palabra....
Todo esto viene a que una gente tan entrañable como la parlametana y sin olvidarme de las otras ciudades: Catania, Messina, y espero no olvidarme ninguna más... No han debido de merecer toda esta gente que ha hecho daño en esta ciudad. Ni nadie merece tener gente a su alrededor que haga daño en cualquier rincón del mundo.
Palermo, un día y medio aquí. En la isla más grande del Mediterráneo, 15:48 de la tarde, y yo escribiendo para tí, agradeciendo lo bien acogido y el buen recibimiento de toda su gente, el hecho de escucharles hablar y de ver esa actitud entrañable y cercana hacia a ti ya se te acelera el corazón y se te llena el estómago de mariposas (permitidme la expresión) sobretodo también cuando pruebas su deliciosa gastronomía...
No quiero olvidarme de esas calles, tan calcadas a la ciudad Condal (Barcelona), esos callejones antiguos, entrañables, que te recuerdan nada más y nada menos que el barrio del Raval de Barcelona, donde pasas y están las familias junto con sus vecinos de toda la vida, de todo tipo de generaciones desde ancianos hasta niños recién llegados al mundo. Y te saludan con mucho encanto, deseándote un buen día en su ciudad, y en su tierra.
Son las 15:56 de la tarde, qué pronto, qué tarde... Me da igual, estoy de vacaciones. Aquí sigo sentado dirigiéndome a ti. Acompañado del silencio, del ruido del mar y del viento, y también de tres libros adquiridos en italiano evidentemente. Deseándote lo mejor para ti, deseando lo mejor a esta isla y a este país con forma de bota, donde su bandera es la pizza. Y sí me dirijo a ti, bella Italia.
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| El puerto de Palermo |
para describir esta magnífica exposición y bien trabajada es de: impactante. Yo pensaba que no existía esto de la Mafia pero documentos reales e impactantes me han mostrado que si, que existía, y que aún existe, y que en España desgraciadamente hay mafia, os puedo decir un ejemplo: miembros políticos rescatando entidades bancarias y la gente del pueblo que iba a ser desahuciada suicidándose. Mientras los políticos, gastándose el dinero público en "caprichos"... Digamos esa palabra....
Todo esto viene a que una gente tan entrañable como la parlametana y sin olvidarme de las otras ciudades: Catania, Messina, y espero no olvidarme ninguna más... No han debido de merecer toda esta gente que ha hecho daño en esta ciudad. Ni nadie merece tener gente a su alrededor que haga daño en cualquier rincón del mundo.
Palermo, un día y medio aquí. En la isla más grande del Mediterráneo, 15:48 de la tarde, y yo escribiendo para tí, agradeciendo lo bien acogido y el buen recibimiento de toda su gente, el hecho de escucharles hablar y de ver esa actitud entrañable y cercana hacia a ti ya se te acelera el corazón y se te llena el estómago de mariposas (permitidme la expresión) sobretodo también cuando pruebas su deliciosa gastronomía...
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| Pintura de Falcone i Borsellino. Magistrado y juez que luchaban contra la Mafia. Totò Riina encargó asesinar a ambos. |
Son las 15:56 de la tarde, qué pronto, qué tarde... Me da igual, estoy de vacaciones. Aquí sigo sentado dirigiéndome a ti. Acompañado del silencio, del ruido del mar y del viento, y también de tres libros adquiridos en italiano evidentemente. Deseándote lo mejor para ti, deseando lo mejor a esta isla y a este país con forma de bota, donde su bandera es la pizza. Y sí me dirijo a ti, bella Italia.
Tranquilo sentado en el puerto de Palermo.
Maravilloso articulo .No lo conozco pero me ha llegado al alma.Espero algun dia visitar este bello lugar.Gracias.
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